Buenas noches a todos los que leen este espacio de Haro Tecglen. Soy Concha Barral, la mujer de Eduardo.
Este mediodía Eduardo, mientras comía en un restaurante de la calle Ballesta, tuvo un desvanecimiento pero se recuperó y pudo salir hasta la calle donde se desplomó. La unidad del SAMUR consiguió recuperar su pulso aunque había pasado mucho tiempo desde la primera parada cardio-respiratoria. Llegó al Hospital Clínico en coma pero con su corazón funcionando.
Su corazón no se ha parado pero la recuperación es muy improbable.
Eduardo no habría querido otra manera de decir adiós: ha dejado escrito el artículo de mañana.
Ni un solo día de su vida ha dejado de escribir, de decir lo que pensaba, de denunciar la injusticia, de mostrar el otro lado del espejo o de levantar la alfombra para ver que se escondía debajo.
Siento no haberme despedido de él, aunque no creo que hubiera podido, estoy demasiado acostumbrada a decirle siempre “hasta luego”.
Les agradezco sus comentarios y les rogaría que los que tanto le detestan y escriben esas barbaridades demuestren un mínimo respeto por la persona que jamás les censuró ni borró sus mensajes.
Muchas gracias. Si hay alguna novedad lo comunicaremos. Buenas noches.
Hasta luego, Eduardo
Al dia siguiente murió, y aunque a algunos les pueda parecer extraño, la noticia no me dejo indeferente, aunque no contaba con la suerte de conocerlo personalmente, muchas tardes coincidiamos mientras yo estudiaba, y al igual que un locutor de radio que acaba siendo uno mas de la familia, era alguien que siempre estaba alli, fiel a la cita, dia tras dia, ya no recuerdo desde hace cuantos años.
Ahora a posteriori he conocido muchas mas cosas de él, su papel en la Guerra Civil, y las iras que ha levantado por sus duras críticas y articulos, y lo que más me ha indignado es como cobardes derechistas que no saben lo que significa la palabra respeto y amparados por la máscara del anonimato, han atacado como perros su pagina, de la cual Tegclen jamás borró ninguno de sus comenterioas por muy salvajes que fueran como prueba de su valia personal.
Han pasado ya 70 años del peor episodio de nuestra historia reciente y parece que haya sido ayer. Desde mi joven perspectiva espero que sepamos asumir nuestro pasado, en mi caso mi Bisabuelo desaparecio en el bando Nacional, en la batalla de Quinto de Ebro. No comparto en absoluto las ideas que lo llevaron a combatir en ese bando, quizás ni él mismo, fueron muchos a los que les toco tirar pa'alante para salvaguardar a sus familias o su propia vida. Pero aun en el caso de que fuera convencido de sus ideales, creo que no podemos a estás alturas recriminarlosno a nosotros, hoy que tranquilamente puedo presumir de discutir con mi amigo pepero, con mi colega borroka, o con mi amic estatutario, sobre la política más conflictiva y después tomarnos unas cervezas juntos. Disfrutemos de la vida, que es al fin, para lo que estamos aqui.
Hasta luego Eduardo....
